Este año, nuestro Comité realizó una evaluación en sus comunidades rurales y estuvo de acuerdo en que la necesidad más apremiante es el agua potable. En algunas comunidades, las familias tienen que acarrear agua de un río o un manantial natural, y algunas veces el agua está contaminada. Muchas comunidades tienen sistemas de agua, pero pueden estar en un estado deteriorado o no satisfacer las necesidades de la población en crecimiento.
Este año hemos trabajado con los Comités de Aguas rurales para reparar la expansión de dos sistemas: uno en Hilapo (Sector Hacienda) y otro en Santa Ana. Ambos sistemas se instalaron hace más de 10 años y necesitan reparaciones y expansión. Los Comités y los líderes locales han encontrado soluciones locales, y nosotros simplemente proporcionamos los materiales: tubos, cemento y arena. Actualmente estamos evaluando otros proyectos con la esperanza de llevar los sistemas de agua a áreas donde no hay acceso.